No me pidas escaleras al cielo

Te ayudaré a sostener la máscara

y fingiré que estoy escuchando música

cuando hables.

Pero no soportaré

que los clamores sordos

hagan que mis rodillas se doblen.

 

Pondré, si tú quieres,

en los versos hermosas palabras:

mariposa, luna, sol,

amor, piedra, caballo….

Pero olvidaré toda filosofía

que, como decía el poeta,

hace de las cosas sólo ideas.

 

Así podré dibujar nuevos perfiles.

para cosas viejas.

Las luces y rayos oblicuos

no cegarán mis versos

ni la realidad bajo las estrellas.

 

Te lo dije muchas veces:

No me pidas escaleras al cielo

ni altares para metafísicas inciertas.